La misión del cristianismo evangélico se centra fundamentalmente en lo que se conoce como la
Gran Comisión, tal como se describe en los evangelios, especialmente en Mateo 28:19-20.
Proverbios 27:13 Nueva Biblia Viva 13 Toma en prenda la ropa del que salió de fiador de un extraño.
Cristo es Nuestro Fiador.
En esta época, salir de fiador significaba ofrecer garantías mediante bienes personales o propiedades. Por lo tanto, si una persona sale de fiador, está obligado a saldar la deuda del extraño y, se le debe tomar prenda para asegurarse de que sea saldada la deuda.
Una prenda es cualquier cosa de valor, como una propiedad o joyas, que se ofrece como una forma de garantía de que la deuda será pagada, una vez que el préstamo es liquidado, la prenda se devuelve al dueño original. Por lo tanto, debemos tener cuidado de a quién le prestamos y por quién salimos como fiador.
Todos, tenemos una deuda que nos es imposible pagar, esa duda son nuestros pecados. Cada vez que quebrantamos uno de los mandamientos de Dios, Consciente o inconscientemente, con conocimiento o por desconocimiento, nos hacemos deudores de Dios, y no hay nada que tengamos o que hagamos para cubrir nuestra deuda.
Más gracias sean dadas a Dios, quien en su infinito amor, Él pagó por nuestros pecados, saldó nuestra deuda con su Sangre en la Cruz, de tal manera nos amó que Cristo es nuestro fiador, si por fe lo aceptamos como nuestro Señor y Salvador. Cristo pagó por mis pecados, salvo soy por su Gracia, Y ¿TÚ?, Te lo dejo de tarea.
¡Absolutamente! Este es un tema fascinante y de gran relevancia en el estudio y la fe. Abordaremos cómo los dichos populares se asemejan a pasajes bíblicos, el peligro de modificar la Palabra y la advertencia sobre las filosofías engañosas.
🧐 Dichos Populares vs. Versículos Originales
Muchos dichos populares, que a menudo se citan como si fuesen versículos bíblicos literales, en realidad son tergiversaciones, resúmenes o adaptaciones de un pasaje, perdiendo en el proceso la profundidad o el contexto del mensaje original.
Dicho Popular (Común)
Parecido o Parcialmente Cierto
Versículo o Contexto Bíblico Original
"Ayúdate que yo te ayudaré"
Se relaciona con la diligencia.
No aparece como tal en la Biblia. La idea bíblica enfatiza la soberanía de Dios y la responsabilidad humana, pero sin esa frase exacta.
"Dios aprieta pero no ahorca"
Se refiere a la disciplina divina.
No aparece en la Biblia. Los pasajes sobre el sufrimiento se enfocan más en la fidelidad de Dios y el propósito redentor de las pruebas (por ejemplo, Romanos 5:3-5).
"El que madruga, Dios lo ayuda"
Se relaciona con la diligencia en el trabajo.
Se basa parcialmente en principios como Proverbios 11:27(RV95): "El que madruga para el bien, halla buena voluntad; mas el que busca el mal, el mal le vendrá." Nótese el énfasis en el "bien" y no solo en la hora.
"Ojo por ojo, diente por diente"
Principio de justicia en la Ley Mosaica.
Éxodo 21:23-25 lo establece como límite para la justicia civil (ley del Talión). Jesús lo resuelve en el Sermón del Monte con un estándar superior: "Pero yo os digo: No resistáis al que es malo; antes, a cualquiera que te hiera en la mejilla derecha, vuélvele también la otra" (Mateo 5:38-39).
"Hay más dicha en dar que en recibir"
Principio de generosidad.
Es una cita directa atribuida a Jesús por el apóstol Pablo, pero no se encuentra en los Evangelios: "...y recordar las palabras del Señor Jesús, que dijo: Más bienaventurado es dar que recibir" (Hechos 20:35).
La diferencia clave está en que el dicho popular a menudo aísla una idea o la enfoca en el beneficio terrenal (ej: madrugar para tener éxito), mientras que el contexto bíblico siempre busca la transformación del carácter y el propósito eterno (ej: madrugar para hacer el bien).
⚠️ Consecuencia de Modificar la Palabra de Dios
La Biblia advierte seriamente sobre la alteración de su mensaje, ya sea añadiendo o quitando elementos. Esta advertencia no es solo por preservar la exactitud del texto, sino porque su modificación conlleva consecuencias espirituales directas:
Juicio y Plagas: El mensaje final del Apocalipsis es uno de los más claros y contundentes.
"Yo testifico a todo aquel que oye las palabras de la profecía de este libro: Si alguno añadiere a estas cosas, Dios traerá sobre él las plagas que están escritas en este libro. Y si alguno quitare de las palabras del libro de esta profecía, Dios quitará su parte del libro de la vida y de la santa ciudad y de las cosas que están escritas en este libro." (Apocalipsis 22:18-19).
Confusión y Engaño: Al diluir o cambiar el mensaje, el camino de la verdad se oscurece, lo que lleva a la gente a la confusión, el error doctrinal y el consecuente engaño espiritual.
Maldición: En el Nuevo Testamento, Pablo advierte contra cualquier evangelio que sea diferente al que ha sido predicado originalmente, declarando que quien lo predique sea anatema (maldito).
"Mas si aun nosotros, o un ángel del cielo, os anunciare otro evangelio diferente del que os hemos anunciado, sea anatema." (Gálatas 1:8).
La gravedad de la advertencia radica en que la Palabra es considerada la verdad revelada de Dios; modificarla es usurpar la autoridad de Dios y poner en peligro la salvación y el conocimiento de quienes la escuchan.
👻 Filosofías Huecas y Sutilezas Vanas
El apóstol Pablo abordó directamente el tema de las influencias externas que distorsionan el mensaje de Cristo, refiriéndose a ellas como un peligro para la creación de Dios, el creyente.
El pasaje central que trata este asunto es:
"Mirad que nadie os engañe por medio de filosofías y huecas sutilezas, según las tradiciones de los hombres, conforme a los rudimentos del mundo, y no según Cristo" (Colosenses 2:8, RVR1960).
Filosofías y Huecas Sutilezas: Se refiere a cualquier sistema de pensamiento, razonamiento humano o argumento seductor y sofisticado que, aunque parezca sabio, está vacío de la verdad de Cristo. A menudo se centra en el intelecto humano o el esfuerzo personal en lugar de la obra terminada de Jesús.
Tradiciones de los Hombres: Son reglas, ritos o costumbres que la gente ha inventado y elevado al nivel de mandamientos divinos, añadiendo cargas innecesarias que Cristo nunca impuso.
Rudimentos del Mundo: Son principios básicos, elementales y a menudo inmaduros que se centran en el material o lo temporal (como la observancia de días, dietas, o el ascetismo sin propósito), en lugar de la plenitud que se encuentra en Cristo.
El Trastorno del Mensaje Divino
Estas influencias, al mezclarse con el mensaje divino, lo trastornan de las siguientes maneras:
Minimizan la Suficiencia de Cristo: El principal peligro de las "filosofías huecas" es que insinúan que solo Cristo no es suficiente, y que el creyente necesita algo adicional (un conocimiento secreto, una disciplina extrema, o una tradición específica) para estar verdaderamente completo o aprobado por Dios. Pablo refuta esto diciendo: "Porque en él habita corporalmente toda la plenitud de la Deidad, y vosotros estáis completos en él..." (Colosenses 2:9-10).
Desvían el Enfoque: El mensaje de la creación es ser reconciliada y unida a Dios a través de Cristo. Las filosofías mundanas desvían ese enfoque hacia el ego, el cumplimiento de la ley o el orgullo intelectual, impidiendo la verdadera dependencia y la paz que viene por la fe.
Promueven un Falso Sentido de Sabiduría: Las filosofías y sutilezas vanas, al estar basadas en la lógica humana y no en la revelación divina, dan una "reputación de sabiduría" que realmente no tiene "valor alguno" para combatir la naturaleza pecaminosa del hombre (Colosenses 2:23).
En resumen, la fe genuina y el entendimiento correcto se basan en la autoridad inmutable de la Palabra de Dios, resistiendo tanto las distorsiones populares como las seducciones intelectuales que buscan eclipsar la verdad central: la plenitud y suficiencia de Cristo.
Proverbios 27:12 Palabra de Dios Para Todos. 12 El prudente ve el peligro y lo evita; el insensato sigue adelante y recibe el daño.
Prudentes y Salvos o Insensatos en Condenación eterna.
Aquí nos encontramos una metáfora interesante que nos muestra la diferencia entre el sabio o avisado y el insensato o simple. Mientras que el sabio es capaz de anticipar y prever los riesgos y amenazas, y actúa con precaución y prudencia, el insensato se expone a ellas y sufre las consecuencias.
La prudencia es un valor fundamental, que nos ayuda a evaluar toda la situación para tomar decisiones conscientes y bien informadas, implica ser cuidadosos, reflexivos y considerar las consecuencias de nuestras acciones, para evitar errores y sufrimientos innecesarios.
Considero que, con el paso del tiempo, todos adquirimos algo de prudencia, cuidamos nuestra salud, nuestros gastos, tiempo, relaciones, en fin, todo lo importante. Pero hay algo aún más importante por el cual todos pasaremos, esto es: un día todos moriremos y nos presentaremos ante Dios para juicio. Hebreo 9:27.
En este juicio, todos seremos juzgados por Dios, todos nuestros actos y pensamientos serán juzgados, el resultado será para condenación eterna en el infierno, o el gozo eterno junto a Dios. ¿Cómo salvarnos de la condenación? Aceptando a Cristo como el hijo de Dios y recibirlo, por fe como nuestro Señor y Salvador. ¿Somos prudentes o insensatos? Yo soy prudente ya he puesto mi fe en Cristo, Él es mi Señor y Salvador, Y ¿TÚ?, Te lo dejo de tarea.
P.D. Si quieres ser prudente y recibir a Cristo como Señor y Salvador, eso no sabes cómo hacerlo, comunícate con nosotros, podemos y queremos ayudarte. presiona aquí