Padre celestial, te doy gracias por tu amor y tu fidelidad. Reconozco que tú eres mi fortaleza y mi escudo, y que en ti puedo confiar plenamente.
Te pido que me ayudes a vivir cada día con la seguridad de que tú estás conmigo, y que nada ni nadie podrá separarme de ti. Te pido que me des sabiduría y valor para enfrentar los desafíos y las oportunidades que se presenten en mi camino.
Te pido que me llenes de tu paz y tu gozo, y que me hagas un instrumento de tu bendición para los demás.
En el nombre de Jesús, amén.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario